Hablar de bullying escolar es un tema que puede generar grandes tabúes e incomodidades, ya que las personas y familiares que los sufren o han pasado por un hecho de estas características, se pueden sentir avergonzados, infravalorados y menospreciados. Si bien es cierto que, cada vez esta tendencia está siendo superada, normalizada y, se está trabajando de manera muy fuerte para poder revertirla y a minorizar sus consecuencias, aunque todos los tipos de acoso evolucionan de manera muy rápida, siendo especialmente difícil de atajarlos, tratarlos y erradicarlo de una única y eficiente manera.

Cuando nos referimos a que es bullying escolar, tenemos que saber y diferenciar que es muy distinto de una pelea aislada y producida de forma casual entre niños si no, que es una situación permanente y reiterada en el tiempo, es un hecho mucho más complejo, dañino y, en el que se producen intimidaciones, situaciones de asedio y acosos continuos, con el objetivo de someter, humillar, chantajear al acosado y, todo esto se produce sin la presencia de una figura de autoridad, como personal del centro escolar, o padres. Mencionar que existen muchos y variados tipos de acoso escolar, cada uno con sus particularidades y dañinas consecuencias, como por ejemplo las diferencias entre el bullying escolar y sexual. Por lo tanto, se define, como todos los tipos de acoso que sufre un niño enmarcado dentro del entorno escolar y, que cumple con los criterios comentados con anterioridad.

Denunciar el Bullying

Denunciar qué hacer en caso de bullying escolar y sobre todo cómo denunciarlo y actuar ante un caso real, es una de las disyuntivas que más diversidad de formas se pueden encontrar, y no existen protocolos milagros a los que recurrir para solucionar el problema, pero sí podemos tomar en consideración algunas pautas de actuación que nos ayudaran a enfrentarnos a algún caso real. Al ser una triste realidad cada vez más frecuente en las aulas, los profesores tienen que actuar como mediadores, juegan un papel decisivo para prevenir el problema y, prestan atención en todo momento para detectar cualquier signo de que pueda indicar la existencia de un caso de bullying escolar.

Tras detectarlo, debe intentar ganarse la confianza del niño que lo sufre, para que él mismo exprese el problema y, comunicarlo a los padres de una manera tranquila y con un ambiente relajado, sin culpabilizar al niño, generar un estrés, creer todo lo que diga sin despreciar ninguna información, ni crear juicio de valores, además de mostrarle apoyo, confianza y seguridad.

Tras esto hay que estudiar consecuencias para los agresores contando con el protocolo del colegio y opinión de otros educadores, sin olvidar de guardar la intimidad y anonimato del acosado. Tras ello podemos seguir las pautas siguientes, para poder denunciarlo de manera adecuada:

  • Asistir a un especialista que ayude al menor y pueda dotarle de herramientas para que pueda superar el problema.
  • Diseñar y poner en práctica un plan de seguridad, para evitar encontrase con los agresores en zonas en las que no exista la presencia de figuras de autoridad.
  • Involucrar al director de la escuela, al consejo escolar y, a todo su personal, para que puedan ayudar a poner remedio a la situación y actuar en su caso.
  • Poner en marcha los procedimientos que tenga el colegio, para estos casos.
  • Hacerlo saber a la policía, las amenazas y agresiones físicas, si han ocurrido, debes comunicárselo y puedes poner una denuncia anónima, si siente que puedes ponerte en riesgo al identificarte. Puedes realizarlos desde el teléfono 900 018 018 contra el acoso escolar que es completamente gratuito.

Para finalizar, si una vez que has puesto en marcha todas estas acciones e intentos llevados a cabo, no logran terminar con el acoso, no hay que darse por vencidos, e insistir. Es muy importante denunciarlo aun cuando no conozcas la identidad de los acosadores.