¿Sabéis el refrán ese que dice que donde está el cuerpo está el peligro? Pues lo podemos extrapolar al mundo de Internet porque al introducirnos en él estamos expuestos a que nos puedan Hackear el Correo Electrónico. Sería una grandísima faena que esto nos ocurriera pero es una posibilidad no muy remota de que nos pueda suceder. Nuestros emails son una fuente continua de trasvase de información, a veces intrascendente pero otras muy muy importante, o sea, que es de vital importancia que estemos prevenidos y atentos a todo lo que recibimos en nuestras bandejas de entrada y a todo lo que le damos salida de las mismas hacia nuestros ordenadores, Smartphones, tabletas o cualquier tercero.

Existen multitud de compañías que se encargan de facilitarte una cuenta de correo electrónico, las más comunes son Gmail, Hotmail, Outlook o Yahoo y, estás tienen una seguridad propia que te obliga a seguir una serie de pasos y averiguaciones para salvaguardar toda tu información (ya sea en modo de recuperar contraseñas o la ya conocida doble verificación, utilizada cada vez más en cualquier comunidad informática), pero también están las cuentas con dominio propio en las que hay que estar muy atento con lo que nos ofrecen porque la seguridad puede ser muy débil y colarnos Spam sin que nos demos cuenta. Siempre digo y tengo esta premisa, hablamos en otro post sobre las contraseñas y cómo debían de ser, creo que es la clave más importante que utilizamos en Internet puesto que es la que nos lleva a acceder a nuestro email, ya que con él nos damos de alta en multitud de servicios y nos sirve como una vía para remitir información importante o recuperar otros datos de por ejemplo redes sociales, por ello, es súper conveniente tener dicha identificación exclusiva para el mismo y no utilizarla para otras cosas.

Cómo saber si te han pirateado el mail

Un Malware es muy fácil de colar dentro de nuestra correspondencia y nos daríamos cuenta cuando al hacer alguna gestión veamos que por ejemplo nuestro nombre aparece en sitios que nosotros jamás hayamos autorizado. También, existen páginas web que te permiten comprobar si han intentado hackear el correo electrónico, por ejemplo haveibeenpwned.com te dice al introducir tu ID si has sido alguna vez pirateado o no. Ante este hecho lo que tenemos que hacer es denunciar y ponernos en contacto con nuestro servidor de emails, ya sea para notificar que nos han robado la cuenta o para darnos de baja del servicio.

Uno de los mayores miedos es la suplantación de identidad mediante el correo electrónico. Nunca nos solemos dar cuenta de que esto nos sucede, pero es una vía muy habitual para los ataques cibernéticos, mediante un mensaje nos cuelan un virus y ya acceden a todos los datos de nuestro dispositivo y por ende, a toda nuestra identificación que tengamos en la red.

A veces hay que plantearse cómo hackear el correo electrónico para empatizar y entender las técnicas que utilizan y así poder estar alerta y con precaución. Los métodos más usuales son los siguientes:

  • Mandar el típico e-mail trampa, desde un remitente que parezca del soporte técnico de nuestro servidor pidiéndonos la contraseña para hacer algo de mantenimiento, pero ese es brusco, pueden utilizar que entremos en una web y nos registremos dentro de ella con nuestro usuario y contraseña, es un alojamiento falso y lo que hacen es copiarnos nuestras claves.
  • Usando una serie de programas que escanean todo lo que tu router trasmite en tus dispositivos, incluidos emails, datos bancarios, contraseñas e usuarios.
  • Si estás en tu trabajo, tampoco puedes descuidarte porque te pueden llamar haciéndose pasar por el informático de la empresa y con eso robarte las claves.
  • Sin que te des cuenta te pueden instalar en algún terminal el programa keylogger y, con él guardan todo el registro de lo que pulsas en tu teclado y te roban la información.